martes, 21 de abril de 2009

Get Carter (Asesino implacable) (Stephen T. Kay, 2000)


Sin prejuzgar al protagonista, una buena película.

En una época con un Stallone de capa caída, en una época en la que las películas de acción ya no interesaban ni hacían taquilla como en los 80 y 90, algunos actores como el citado lograron, en contadas ocasiones, reconvertirse y elegir papeles algo más profundos a los acostumbrados. Es el caso de este filme desconocido para algunos y prejuzgado por otros; todos aquellos a los que la mera palabra "Stallone", "Schwarzenegger" o similares escandaliza, e impide a muchos empezar a ver un filme. Acompañan a Stallone, en su intento de reconversión, un Mickey Rourke en horas bajas, pero convincente y más que correcto en su papel, y un nunca desdeñable Michael Caine. Los personajes secundarios hacen también un buen trabajo. La historia puede ser muy típica, pero tiene ritmo y está bien resuelta. La edición y la imagen en general es interesante y ágil, y la película no aburre. Me sorprenden las críticas tan duras contra este filme, que a mi personalmente me engancha desde el principio, desde el montaje inicial de los créditos, con el protagonista que, después de haber dado una paliza a un macarra, emprende un viaje en tren con una música, un traje y una perilla bastante cool. El bueno de Sly está incluso guapo, y al menos a mi parecer, reconvertido y adaptado -aunque sea de manera efímera- para los tiempos en los que los músculos y los mamporros no impresionan a casi nadie. para los tiempos en los que ya no quedan héroes de acción.

Nota: 6


lunes, 20 de abril de 2009

Todo es mentira (Álvaro Fernández Armero, 1994)


¡Grande!

Hace algunos años vi esta película varias veces seguidas y siempre la he recordado como una de mis españolas favoritas, junto con "Los peores años de nuestra vida", "Tierra" y "El día de la bestia", por decir algunas de distintos géneros, y que, igualmente, he visto varias veces seguidas, enteras o en parte, cuando todavía tenía VHS. Hace poco volví a verla y me seguía pareciendo muy buena. Los actores y los diálogos desprendían naturalidad y espontaneidad por todas partes, y es una buena manera de recordar como era Penélope Cruz antes de convertirse en Pe; una chica graciosa con voz de pito, pareja perfecta para Coque Malla (aunque a veces ambos parezcan un poco "hobbits de la comarca). El resto de actores -entre los cuales se encuentra además el director Fernando Colomo- y sus personajes estaban igualmente bien escritos y tratados.
En definitiva, una película coral simpática y entretenida. Mas concretamente la definiría como "película maja".

Nota: 8